Sí, podían ser los protagonistas de una serie de dibujos animados, como lo eran Tom & Jerry, pero no lo son…
Hoy el día no comenzó muy bien que digamos. En uno de los Starbucks de Brodway, donde suelo desayunar desde que estoy en NY me tiré el café encima. Madre la que he liado. La peor parte se la ha llevado la mochila de la cámara. La Lowepro parece que ha cumplido con nota uno de sus cometidos; ha aguantado el café hirviendo como si nada.
El resto de la clientela del Starbucks, la mayoría con sus MacBooks de pro, han apartado durante un momento la mirada para ver como chorreaba mi café, pero en seguida han vuelto a sus quehaceres: facebook, twitter y demás.
Había pensado en bajar a South Ferry. Allí se coge un barco que va a St. George desde donde, al parecer, se pueden tener buenas vistas del skyline neoyorkino. Pero, he vuelto a equivocarme en el metro. Bueno, esta vez se ha equivocado la señorita a la que he preguntado, ya que había entrado en el tren casi sin mirar por no perderlo. Cuando miro para atrás por la ventana y vuelvo a ver que estamos cruzando por el puente de Manhattan… Miro a la chica, me mira. Nos miramos mutuamente con cara de … Me ha pedido disculpas 20 veces lo menos. Al final me ha acompañado a dar la vuelta, puesto que ella se había equivocado también. ¡Vaya guasa!
El caso es que me he visto de nuevo en Brooklyn, así que he decidido cruzar el puente aprovechando la ocasión. Ya iría a lo del ferry.
Tras cruzar el puente me dirijo a visitar el WTC y el 9/11 memorial.
Para visitar el memorial hay que adquirir un ticket a cambio de un donativo.
Los dos edificios que reemplazan a las torres gemelas
El monumento consiste en una especie de fuentes que ocupan exactamente el espacio que ocupaban ambas torres.
El edificio que está detrás de mí es un museo, aún en construcción, donde entre otras cosas hay restos de ambos edificios.
Creo que sobra cualquier tipo de comentario al respecto…
Tras la visita al memorial y al WTC me dirijo al Pier 17. Como veréis cambio de planes según va pasando el día, gracias a la equivocación en el metro.
Continuo caminando por el puerto hasta que veo una cola inmensa para coger un ferry. Pregunto si es el que va a St. George, es decir, Staten Island.
La tía pedorra de la ventanilla no me entiende ni papa. Es curioso, pero resulta que a quienes más me cuesta entender a mí, más les cuesta a ellos entenderme también a mí. Vale que mi inglés es bastante malo, malísimo diría yo, pero coño también estoy seguro que en ocasiones mi pronunciación es mejor que la de ellos. He probado a meterme 3 chicles en la boca, a retorcerme la lengua o incluso mordérmela y no hay manera. ¿Pero como no me puede entender ni siquiera Saint George? Válgame dios, o como dirían ellos … Oh, my God!
No me queda más remedio que preguntar de nuevo y, esta vez sí, nos entendemos sin problemas.
Las colas eran para ir a New Jersey. Para ir a Staten Island, que además es gratis, hay que coger este ferry…
Hay que decir que el ferry no es para que la gente vaya a tomar fotos de la Estatua de la Libertad o del skyline, sino que es el ferry que utiliza la gente que vive en la isla para ir a trabajar a Manhattan, tal y como me comentaba un poli en el barco.
La cosa para los turistas es bastante tonta. Uno coge el ferry, toma unas fotos en los 25 minutos que dura el trayecto, llega a la isla, se baja del barco y se sube rápidamente para volver a Manhattan en el mismo ferry.
Una hora invertida para tener fotos como estas…
Vosotros diréis si merece la pena. Yo creo que sí, aunque necesito imperiosamente un teleobjetivo.
Tras un paseo por la zona, tras regresar de Staten Island, salgo pitando. Tenía que estar antes de las 21.30 h. en la 6th con la 8th, luego veréis porqué.
Además tenía que intentar comerme uno de los sandwich más famosos de la ciudad en Katz´s Delicatessen, que casualmente estaba más o menos cerca de la colmena donde duermo.
¿Era esto lo que tenía que comer?
Eso se llama Pastrami sandwich y no puedo decir que me haya entusiasmado, la verdad. Pero bueno, parece que este también es famoso, casa fundada a finales del siglo XIX, así que había que probar.
Al final me ha resultado cansino y caro. Casi 25 pavos con la cerveza. Creo que lo de Delicatessen se lo podían ahorrar en el cartel. 😉
Imagino que querréis saber porqué tenía que estar antes de las 21.30 h. en tan señalado lugar. Esta es la tercera sorpresa de la que os hablaba ayer. Recordaréis que buscaba el Papayas; sí, el de los perritos asquerosos. Pues en esas estaba cuando mira por donde me encontré con esto…
No me lo podía creer, sin quererlo me había topado con el mítico Blue Note. Entré, aunque estaban cerrando. Vi un cartel del que no daba crédito… Larry Coryell y Stanley Clarke. Ambos en formato trío iban a dar unos conciertos en doble sesión (20.00 h. y 22.30 h.) desde el martes hasta el domingo. Estaba que no cabía en mí. Así que hoy era el día y para allá que he ido.
Larry Coryell Trío:
Larry Coryell, guitar
John Colianni, piano
Daryl Johns, bass
Stanley Clarke Trio:
Stanley Clarke, bass
Lenny White, drums
Beka Gochiashvili, piano
Conciertazo, corto pero intenso.
En los dos primeros temas no me parecía nada a Coryell, pero cuando se ha quedado él solo, madre mía, qué espectáculo.
Por supuesto, no ha faltado la versión del Bolero de Ravel.
Ojito al bajista que lleva, jovencísimo, pero un máquina.
Respecto a Stanley Clarke, que voy a decir…
También lleva un pianista quinceañero que es la caña.
De Larry Coryell no hay video, pero aquí tenéis un poquito de Stanley Clarke, para que algunos se tiren de los pelos.
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See you!
Vaya pedazo entrada te has marcado hoy!!! Sí señor!!! qué fotos!!!
Y lo del Blue Note… de note, digo… de nota!! Qué pasadaaaaaa
Yo creo que si que mereció la pena el ferry, aunque fuera llegar y volver.
Y el puente de Brooklyn… jo!
Yo quiero ir a NY!!
Por cierto, vaya día no? en manga corta!!
Aquí hoy nos hemos despertado, al menos yo, rodeados de nieve y con temperaturas invernales, pero no te preocupes, que para cuando tu vuelves, vuelve el calorcito.
See Youuuu
Yo creo que las fotos están fenomenal
Y las otras sorpresas?….
Aprovecha que ya te queda menos…
Besitos
Sinceramente, no es justo, soy yo el que tenía que estar en ese concierto, a ti te da igual, sólo lo haces para darme envidia, lo sé, eres un capullín, y encima, para rematar, una foto con Larry. Le hablarías de mí, supongo, a que sí, dime que sí…. Bueno, cuando sea mayor iré a USA a ver un concierto como tú, …. y a más cosas.
Ya sólo te queda visitar un Guitar Center, tienes uno en Manhattan, en la 25 West 14th Street, otro en Queens en la 34-17 48th Street, otro en Brooklin en la 139 Flatbush Ave, y 9 más en todo New York. Tráeme una guitarrica de recuerdo anda!!!!
Ah! Y de Stanley qué decir, me deja sin palabras… Es un máquina, como dicen ahora.
Buah! Si supieras donde estoy en este momento…
Estate atento a la siguiente entrada…
Ah, y sí le hablé de ti. Le dije que te gustaba más Lee
Ritenaur y no veas el mosqueo que se pilló. Jajajaja.
No me fastidies, dimelo, que me tengo que ir a acostar.
Duerme tranquilo, mañana lo lees. Pero me vas a odiar más aún.
Que barbaridad! Como lo estas pasando! Eso si que es hacer inmersión NY y lo demas son tonterías…
Por cierto, las fotos son la leche! Enhorabuena!
Sals!